viernes, 14 de mayo de 2010

DIARIO EL COMERCIO: SÓLO EN EL ECUADOR

Quito, a 14 de mayo del 2010.
Publicado por el Diario el Comercio

Solo en el Ecuador

Sobre la aplicación del sistema de rebaja de penas denominado ‘2x1’, el fiscal Washington Pesántez ha dicho que “en ninguna parte del mundo existe tanta ganga o promoción de penas como en el Ecuador”, en eso tiene razón; de igual manera nos preguntamos ¿si en alguna parte del planeta existen legisladores que se atemorizan para fiscalizar o altos funcionarios de control y justicia que huyen de los juicios políticos y la rendición de cuentas al pueblo, como el caso ecuatoriano? No se explica además que el ‘2x1’ sea aplicable únicamente para determinados delitos, ¿entonces de qué sirve aquel principio supremo de Montecristi que declara al Ecuador como un Estado Constitucional de derechos y justicia y que todos somos iguales ante la Ley?

Saúl Mayorga Puma

COMENTARIO ADICIONAL

Es lamentable que nuestro país, en pleno siglo XXI, esté atravesando una de las peores épocas de corrupción, descaro y sinvergüencería; ya nadie creemos en la justicia, nos da terror que los abogados nos hablen de la fiscalía o de los organismos de control. Estamos hartos de las cosas que pasan en el organismo legislativo donde está “prohibido” la fiscalización; los procesos duermen el sueño de los justos en los tribunales y juzgados de la República; las violaciones y la vulneración de los derechos son confirmados y ratificados por los jueces de la Corte Constitucional; se absuelven a los asesinos y se juzgan a los muertos; se gastan millones de dólares en intentar arreglar los problemas de la educación superior y la Asamblea les echa al piso y les declara no vinculantes; los pícaros del poder caen fácilmente en sus fechorías pero desde arriba vienen los ángeles malos y le sacan de las cárceles aunque afuera sigan siendo dueños del circo y comiéndose los cheques; en la Asamblea no hay por lo menos un céntimo de idea para legislar y hacer leyes compatibles a la razón y al sentido común del pueblo inteligente; pues así no mas funcionan las cosas en nuestro querido país. En las instituciones públicas existe menos que el 1% de servidores valientes, dignos y honestos que se atrevan a denunciar la corrupción, pero corren el riesgo de quedarse sin el pan para su familia. Me da alergia cuando ingreso a la Fiscalía y leo un letrero que dice DENUNCIE, no se quede callado - ¿para qué? ¿para que le persigan, le sigan juicios, le voten del trabajo, le amenacen a matar, le vean con mala cara? Es mejor que no pongan esos letreros que denigran la verdad y enferman las mentes sanas de los ciudadanos honestos que en buena hora habemos muchos en este querido país.